Este miércoles 1 de octubre de 2025, la comunidad de San Javier celebró con devoción el Día de Santa Teresita del Niño Jesús. La jornada festiva comenzó con la tradicional procesión, que inició a las 16:30 horas. Los fieles acompañaron la imagen de la santa en su recorrido, que contó con el simbólico acompañamiento de la autobomba de bomberos voluntarios. Posteriormente, la celebración culminó con la Misa en la Capilla Santa Teresita.
Homilía de Armando Cattaneo
Destacando la grandeza de lo cotidiano y el valor del presente
El Presbítero Armando Cattaneo del Santuario San Francisco Javier ofició la misa y compartió una profunda reflexión sobre la figura de Santa Teresita del Niño Jesús. Sus declaraciones se centraron en cómo cada santo es una respuesta de Dios a una época y el mensaje particular que esta joven carmelita ofrece a la humanidad, hoy como ayer.
El Santo como respuesta histórica
Cattaneo enfatizó que la vida de los santos se encarna para responder a lo que se vive en un tiempo determinado. Mencionó ejemplos como San Francisco de Asís, quien apareció en una época de apego a las riquezas para invitar a la grandeza del desprendimiento y la pobreza. O San Maximiliano Kolbe, que en la crueldad de la Segunda Guerra Mundial y los campos de exterminio como Auschwitz, dio su vida por otro, mostrando un amor que salva.
El Mensaje de Santa Teresita: Lo extraordinario en lo ordinario
El Presbítero destacó que Santa Teresita del Niño Jesús surge en el siglo XIX, un tiempo del auge de la razón, con un mensaje tan simple y una vida muy breve. Su singularidad radica en que no se caracteriza por milagros espectaculares como otros santos (mencionó el ejemplo del Padre Pío y sus estigmas), sino por la grandeza de lo cotidiano y las pequeñas cosas. «Cuando analizamos la vida de Santa Teresita del Niño Jesús, vemos que hace hace extraordinario las cosas ordinarias… su vida es extraordinaria por el ofrecimiento, por hacer grande cada cada cosa por pequeña que sea.»
La invitación a vivir plenamente el instante
El mensaje de Teresita es un llamado vigente para la sociedad actual, donde se busca permanentemente «lo espectacular o lo extraordinario». Cattaneo resumió su enseñanza como una invitación a «vivir a fondo plenamente cada instante», ya que es «allí donde se juega la grandeza de nuestra vida».
Para reafirmar la importancia del presente, citó a San Ignacio de Loyola, quien decía que una de las «grandes tretas del enemigo… es sacarnos del presente» llevándonos al pasado o al futuro con fantasías. La razón es simple: «Somos dueños de este ahora».
«Santa Teresita nos invita a eso. A vivir, a ofrecer cada cosa que hacemos, vivir cada cosa que hacemos con esta mirada de fe, con esta mirada puesta en en lo que es definitivo.»
Finalmente, invitó a los presentes a pedir la intercesión de Santa Teresita para tener su misma fidelidad y amor en las cosas que se hacen cada día.
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